Un buen puro define a su fumador, como el poema al poeta:

Dicen los entendidos en el arte de fumar puros, que a la hora de elegir un buen puro debemos dejarnos llevar por los sentidos: la vista, un puro bien terminado y elegante, el tacto, prieto y bien elaborado, firme pero no duro, el olfato, elegir un puro de un estupendo olor a tabaco fresco y el gusto, un puro de sabor más suave o fuerte en función de nuestras preferencias.

¿Cómo se fuma un buen puro?

Disfrutar de un buen puro Doble M requiere de un ambiente tranquilo y agradable para disfrutar de su aroma de forma adecuada. A la hora de fumar un buen puro, la sensación debe ser de placer .El puro, no es un cigarrillo, por lo que aspiramos el humo, pero no lo tragamos, sino que lo dejamos en nuestra boca para degustarlo.

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